EN TORNO AL PLANISFERIO

Un mapa no es mas que una representaciòn  del mundo. Nuestro eurocentrismo, según el cual Europa es el origen de todas las cosas y junto a su "hijo", Estados Unidos, el centro alrededor del que gira el mundo, hace que estemos acostumbrados a las representaciones cartograficas clásicas. Esas que fisuran el Pacífico y dan relevancia al Atlántico. Como eje está el Viejo Mundo.

Planisferio en uso: Europa como eje, Pacífico fisurado
y en materia de tamaño Groenladia equivale a Suramérica.

Por ejemplo, parece increible que esos planisferios arcaicos continuen apareciendo en la prensa, la TV y los textos escolares. No sabemos de modificaciones en la Cuba castrista, en la Venezuela chavista y ni se mencionan en el Chile de Allende. Pareciera que quienes conducen procesos revolucionarios “no están ni ahí” con la guerra cultural que es indispensable complemento de la guerra política, social y económica.

Un mapa, en definitiva, es una representación de la realidad, pero esta puede ser desfigurada. Un intento por restablecer las exactas dimensiones del mundo es la conocida como "proyección de Peters". Tal cartógrafo desarrolla un sistema de proyección cartografica con unas características muy concretas y que tenía la virtud de intentar terminar con la tindenciaa eurocéntrica en la esfera de los mapas. 

Planisferio nacioinalizado

La proyección de Peters es poco conocida. La vigente era la de Mercator. El citado cartógrafo la cuestiona por dos motivos: uno, en la medida que se va ganando en latitud los paralelos están cada vez más separados hasta llegar a un punto en el que no es posible subir más. Esto supone que las latitudes “altas” están sobredimensionadas, y parecen mucho más grandes que las latitudes “bajas”. Así, por ejemplo, en el planisferio clásico, Groenlandia parece mucho más grande que la Península de Arabia y que Suramérica. En el siglo XVI, cuando Mercator hizo su mapa, esto no era un problema. Sin embargo. los descubrimientos exigían que se representase todo el planeta en sus proporciones exactas. La otra falla.  Es que pone en el centro del mapa la Línea ecuatorial. Entonces, el hemisferio Norte aparece mucho más grande que el hemisferio Sur.

1) Europa (9,7 millones de km. 2) aparece mayor que América del Sur (17,8 millones de km. cuadrados); 

2) La ex URRS (22,4 millones de Km.2) se ve mayor que África (30 millones de km. 2); 

3) La Línea ecuatorialel no aparece en el centro del mapa. Dos tercios del mapa se dedican a la representación del hemisferio norte, un tercio al hemisferio sur; 

4) Escandinavia (1.1 millones de km.2) se representa mayor que la India (3,3 millones de km. 2); 

5) Groenlandia (2,1 millones de km.2) aparece en el mapa mayor que China (9,5 millones de km.2); 

6) la distorsión eurocéntrica se mantiene si comparamos países concretos: Italia tiene igual tamaño que Somalia (ésta última es dos veces mayor); Suecia aparece dos veces mayor que Egipto. Es lo contrario. etc.

El aporte de Peters es importante. No obstante no supera la torpeza de diseñar el Pacífico figurado con lo cual quedan todo el borde del Nuevo Mundo –de Tierra del Fuego a Alaska marginaLy separado de Asia y Oceanía. Otro error, es que no discute aquello que ewl Norte este arriba y el Sur abajo. Este tema lo trata el argentino Arturo Jauretche y lo pone de relieve el caricaturista de Mafalda. Vale la pena anotar que el chileno Tancredo Pinochet Le-Brun hace ya un siglo señalaba que para un suramericano el Extremo Oriente era el Extremo Occidente…