En
el centenario del autor de “20 poemas de amor y 1 canción desesperada” al
parecer no se menciona la anécdota de la cual sería protagonista el Presidente
Gabriel González Videla. En 1947 el poeta es excluido del Senado. En 1948 la
Corte Suprema de Justicia aprueba el desafuero. Se ordena la detención.
La
policía habría recibido la siguiente orden, aparentemente contradictoria, del
mandatario: ”Búsquenlo, pero no lo encuentren”. Al mandatario no se le escapaba
que un poeta de la estatura de Neruda recluido en la penitenciaría o deportado
a un campo de concentración como Pisagua habría sido negativo para su gobierno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario