Algo extraño. No es de ahora, sino que lo advierto por decenios. Las izquierdas -de cualquiera índole- simpatizan con el separatismo vasco y catalán. En mi familia de origen que fue muy antiFranco y proRepública se escuchaban elogios a ambos pueblos cuyo afán fragmentador es conocido.
Resulta -reitero- extraño, pues esas izquierdas promueven -de Manuel Ugarte a Chávez, pasando por Haya, Mendieta, Ramos, Grove, Felipe Herrera- la integración de nuestra América. Se proclaman continuadores de la tesis de Bolívar y Martí. Si dicen impulsar la unidad aquí sorprende favorezcan el desmembramiento de España.
Alguien anota que es una inconsecuencia. No basta esa descalificación. Hay que investigar con mayor profundidad el doble standard. Debemos pesquisar las raíces de esta dualidad. Incluso etarras se atienden en clínicas de La Habana y vacacionan en la Isla. Importante es investigar las raíces de la simpatía de la zurda respecto al separatismo.
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