miércoles, 11 de junio de 2014

RUTINA O RENOVACION EN LA ESCUELA

La estructura escolar se resiste al cambio. Se aplican "n" reformas en nuestra vida republicana. Sin embargo, continúa siendo la misma. Mudan -como lo expreso en mi obra "Libro negro de nuestra educación"- sólo las etiquetas. Sin embargo, por amnesia nadie recuerda la inmediatamente anterior. La nueva se recibe con ingenua esperanza. "Todo debe cambiar, para que siga igual", según se anota en "El gatopardo". La rutina es "religión" al interior de los planteles. Por decenios hasta los chistes de los docentes son los mismos.



Muralla que separa a expertos de la  realidad
El magisterio, en general, sus líderes en particular, las Facultades de Educación y los representantes estudiantiles son superficiales para detectar las falencias del sistema. Jamás indagan sobre las sucesivas reformas ensayadas. Optan por el facilismo de buscar un modelo foráneo. Ahora es Finlandia. No se estudian los éxitos registrados por países del Asia (Japón, Corea, Singapur...) . En el ayer, por turno, son Francia, Gran Bretaña y Alemania. Es la "copiomanía" con el agravante que, a veces, los imitadores calcan tardíamente.



Lo urgente es diseñar un sistema nacional. Ello supone estudiar las necesidades del país y bosquejar el tipo de ciudadano que se requiere. Sin embargo, perdura el clásico edificio de tres pisos (básica, media y superior). Todo se encamina hacia ese vértice juzgado la suprema meta. La U es el fetiche. De ahí egresan los médicos, los abogados y los ingenieros. Todo lo demás es ordinario -"rasca"- solo esa institución confiere lustre y fuste. Quienes cuestionamos tan añeja estructura estamos privados o restringidos de tribuna.





No hay comentarios: